
¿Sabías que 1 de cada 4 personas podría sufrir disminución auditiva? Esta alarmante cifra, respaldada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), nos recuerda la necesidad de cuidar nuestra audición. Tomar conciencia desde ahora y actuar con prevención puede marcar la diferencia. La audiometría es una herramienta clave para detectar problemas auditivos antes de que se agraven. Este sencillo examen permite evaluar la salud del oído y tomar medidas a tiempo para evitar una disminución auditiva progresiva.
Detectar a tiempo evita problemas futuros.
La exposición constante al ruido puede provocar serios problemas auditivos. Ya sea por el uso excesivo de auriculares, asistir a eventos ruidosos o trabajar en ambientes con altos decibeles, nuestros oídos están en riesgo. Aplicar la regla 60/60 (60% del volumen por no más de 60 minutos) y usar protección auditiva son pasos simples que ayudan a prevenir la disminución auditiva. Una audiometría regular puede indicar si el ruido ya está afectando tu capacidad auditiva.
Medicamentos y entornos que afectan tus oídos
Existen sustancias llamadas ototóxicas presentes en algunos medicamentos y ambientes laborales que pueden dañar el oído interno. Consulta con tu médico si estás expuesto a estos factores. Además, estar alerta a los niveles de ruido que te obligan a alzar la voz para comunicarte es una señal clara de que podrías estar en riesgo de sufrir problemas auditivos. Hacerte una audiometría es el primer paso para detectar cualquier disminución auditiva de forma temprana.
Así como visitas al oftalmólogo o al dentista, incluir una audiometría en tus chequeos médicos es esencial. Especialmente si vives en Ecuador y estás expuesto a altos niveles de ruido o factores de riesgo, una evaluación auditiva anual puede ayudarte a identificar problemas auditivos de forma oportuna. Recuerda que, si se detecta a tiempo, la disminución auditiva puede tratarse eficazmente, incluso con audífonos para pérdida auditiva que se adaptan a tus necesidades.